Catalonia Grand Costa Mujeres All Suites & Spa, Cancún (MX) - Ofertas y Reseñas

instalaciones limpias, piscinas bonitas, gimnasio cómodo

No había sombrillas en la playa!!! ¡El internet es pésimo!!! Deberían incluir más opciones veganas en el menú a su restaurante vegetariano, además el servicio de comunicación sobre alergias no sirve de nada.

La playa es hermosa y me encantó el restaurante japonés, con un chef súper profesional que hizo un espectáculo en vivo. La experiencia de la piscina privada fue increíble, perfecta para relajarse y disfrutar de unos tragos.

me sentí como si fuera mi propia casa, no tengo ninguna queja

Las habitaciones son bonitas y modernas, todo nuevo y limpio. Las instalaciones en general son atractivas, muy limpias y las piscinas están bien cuidadas. La experiencia en el restaurante teppanyaki fue espectacular y memorable. Además, el servicio de los bell boys fue excepcional, siempre atentos y amables.

Faltó un poco de control en las áreas comunes.

Experiencia inolvidable en un entorno hermoso

Disfruté mucho de las actividades diarias, siempre había algo nuevo para hacer. La experiencia en el restaurante temático fue excepcional y los cócteles eran deliciosos. Asegúrense de hacer reservaciones con antelación para disfrutar de los restaurantes a la carta. ¡No se arrepentirán!

La playa estaba limpia, pero faltaban sombrillas para disfrutar del sol cómodamente. Las actividades del club infantil fueron fantásticas. Las piscinas son modernas y bien mantenidas. Sin embargo, el servicio en algunos bares fue lento y se notó la falta de personal en horas pico.

Piscina tranquil·la ideal per relaxar-se, menjar boníssim amb una gran varietat. El servei molt atent i amable, tot i que a vegades una mica lent. Bona oportunitat per fer activitats durant el dia.

Ideal para familias que buscan relajarse

Me encantó el buffet, cada día había pescado fresco preparado de diferentes maneras, como crudo y a la parrilla, algo que realmente valoro. Además, en una de las cenas, el chef de un restaurante japonés nos ofreció un espectáculo en vivo mientras cocinaba, fue increíble, eso sí que le dio sabor a la noche.

No fue barato, pero aun así lo consideré aceptable.

Increíble la comida en todos los restaurantes.

El hotel en general tiene instalaciones modernas y limpias, lo que me encantó. Las piletas son espectaculares, especialmente la área de la piscina más tranquila, donde se podía relajarse sin tanto ruido. La playa tiene buena calidad, con suficiente espacio para reposeras y acceso rápido a bebidas. Los empleados se notan muy amables, especialmente Jessi, siempre con una sonrisa. Aunque el menú del buffet tiene buena calidad, me faltó variedad en los platos. noté paredes un poco descuidadas en nuestra habitación. A veces, el servicio en algunos restaurantes temáticos fue un poco confuso, ya que no siempre había disponibilidad de mesas, aunque al final encontré un espacio en el Grill, donde la comida fue excelente. Por otro lado, el aire acondicionado y el servicio de limpieza fueron muy buenos, aunque el room service tarda un poco. Me gustaría que mejoraran la limpieza de la playa, ya que había algunos residuos plásticos.

Disfruté de las actividades diarias organizadas, que hacían que cada día fuera algo nuevo. La variedad de comidas en los restaurantes es buena, especialmente las especialidades internacionales. Un día, probé el cocktail chingón, que mezclaba tequila con mango y chili. La experiencia fue refrescante.

Faltaba sombra en la playa y el servicio de algunos bares era lento. La playa tenía residuos plásticos que afectaban la experiencia.

el clima fue variable. la variedad de restaurantes era excelente, especialmente los mexicanos. el diseño del hotel es muy moderno. el trato del personal fue realmente excepcional.

excelente experiencia en la suite superior con vista al mar

entretenimiento variado, limpieza diaria

demora en el room service

Un paraíso tropical! Dos impresionantes piscinas, comida deliciosa y actividades entretenidas. La variedad de restaurantes es exquisita, desde mexicano hasta asiático. Y el cóctel chingón, ¡una joya!

El servicio en los bares fue más lento que un caracol con jet lag.